
¿Es seguro usar los datos móviles para las apps bancarias?
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Desde la popularización del Bizum y otros servicios bancarios para smartphone, cada vez es más frecuente que llevemos en el bolsillo nuestras apps bancarias para realizar cualquier transacción sobre la marcha, hacer pagos NFC, enviar transferencias a nuestro primo o, simplemente, revisar nuestro balance y nuestros últimos movimientos.
El futuro sin duda es móvil, y es bueno que podamos acceder a nuestras apps bancarias en cualquier momento y en cualquier lugar. Sin embargo, es importante tener en cuenta los riesgos en los que incurrimos al hacerlo, para poder tomar las medidas de prevención necesarias y evitar posibles hackeos que podrían costarnos mucho dinero y causarnos daños muy severos.
¿Datos móviles o Wi-Fi?
Comenzando por lo esencial, cuando utilizamos nuestro smartphone para realizar operaciones bancarias tenemos que elegir si lo haremos usando nuestros datos móviles o si nos conectamos a una red Wi-Fi. En este caso, la elección es sencilla: siempre es más seguro usar las redes móviles, porque las redes Wi-Fi con frecuencia presentan serias vulnerabilidades, especialmente las de espacios públicos como cafeterías, aeropuertos o bibliotecas. Cualquier persona que cuente con la clave de una red Wi-Fi lo tiene muy fácil para registrar los datos que envían y reciben los demás usuarios conectados a esa misma red, y esto se agrava si la red no cuenta con clave de ningún tipo.
Sin embargo, esto no quiere decir que las redes móviles sean 100% seguras. Aunque la señal de tu smartphone es muy difícil que sea interceptada por un hacker, los datos que envías o recibes sí pueden ser hackeados por otros medios, por ejemplo si tu teléfono está infectado por un malware o si facilitas tus datos de forma accidental al caer víctima de un ataque de phishing. Entonces, sí, siempre es recomendable usar los datos 4G o 5G para gestionar nuestras apps del banco, pero eso no significa que usar los datos móviles nos vaya a proteger de cualquier posible hackeo.
La encriptación de una VPN
Dentro de este contexto, la encriptación de una VPN se constituye como una herramienta esencial para garantizar la privacidad de tus datos estés donde estés. Una VPN codifica de extremo a extremo todos los datos que envías o recibes desde tu dispositivo, tanto si utilizas una red móvil como si te conectas a través de una red Wi-Fi. De esta manera, incluso si tu conexión pasa por una red Wi-Fi que esté comprometida, un hacker no podrá registrar tus datos bancarios, que estarán encriptados y le serán imposibles de descifrar.
La verificación en dos pasos
Un hacker podría, en cambio, hacerse con tu nombre de usuario y contraseña para acceder a tu entidad bancaria y utilizar los datos de tu tarjeta de débito o transferirse a sí mismo una cierta cantidad de dinero. Para prevenir esto, es fundamental que actives la verificación en dos pasos para acceder a tus cuentas o, al menos, a las funciones más sensibles. El sistema de verificación en dos pasos vincula tus operaciones bancarias a una confirmación extra que solo puede darse desde el dispositivo o la cuenta de correo que decidas tú. De esta forma, incluso si un hacker se hace con tu nombre de usuario y contraseña, le resultará imposible robar tus fondos porque estarán vinculados a un dispositivo al que solo podrás acceder tú.
Las contraseñas robustas
Claro que siempre es mejor que nadie pueda averiguar nuestras contraseñas en primera instancia. Para impedir el robo de contraseñas, la mejor herramienta con la que contamos es el uso de contraseñas robustas. Una contraseña robusta es aquella que está compuesta por caracteres al azar, combinando letras en mayúsculas y minúsculas con símbolos y números. Además, es importante que todas nuestras contraseñas sean únicas, para asegurarnos de que todas nuestras otras cuentas permanezcan a salvo si nuestros datos de acceso a una de ellas quedan comprometidos.
Protección del smartphone
El hecho de tener acceso a nuestras cuentas desde el smartphone es muy conveniente y práctico, pero no debemos olvidar que los smartphones pueden perderse –o ser robados– muy fácilmente. Si nuestro smartphone no cuenta con una protección adecuada corremos el riesgo de perder el control de nuestras cuentas bancarias simplemente como consecuencia de un hurto. Asegúrate entonces de proteger adecuadamente el acceso a tu teléfono, y evita en lo posible el desbloqueo mediante identificación facial: si lo usas, un ladrón solo necesita orientar rápidamente tu smartphone hacia tu cara para desbloquearlo y hacerse con el control de tu sistema. Es mejor que utilices sistemas de desbloqueo como el patrón, el PIN o la huella dactilar.