
Ventajas y desventajas de las redes 4G
Blog
Las tarifas telefónicas que prometen una navegación a través de internet a gran velocidad suelen presentar la conexión a una red 4G como requisito para disfrutar de la misma. Estas redes ofrecen a los usuarios experiencias diferentes en materia de conexión a internet, desde películas online en alta definición hasta enormes velocidades de bajada de datos.
El nombre de esta tecnología responde a “cuarta generación”, dado que ha venido por detrás de otras innovaciones en materia de telefonía móvil, en concreto 2G y 3G, la que la mayoría de los usuarios están utilizando a día de hoy. También recibe el nombre de LTE (Long Term Evolution), en sustitución de la actual UMTS (Universal Mobile Telecommunication System).
Si contamos con un terminal 4G, la velocidad de bajada que podremos alcanzar es de hasta 1Gb de descarga, un gran atractivo frente a los 2 Mbps máximos de cualquier dispositivo 3G. Esto siempre que dispongamos de los requisitos de conexión necesarios para acceder al servicio, algo que no siempre va a ser posible aunque nuestro móvil esté preparado para ello.
Pros y contras
¿Dónde podemos encontrar este tipo de conexión? Lo cierto es que, contratando una de estas tarifas con la promesa de navegar a grandes velocidades, vamos a poder disfrutar de sus servicios únicamente en lugares determinados. Por ejemplo, tal y como exponen dos de las principales compañías telefónicas, Vodafone y Orange en sus páginas web, sus redes 4G están presentes en un número determinado de ciudades españolas.
Si la nuestra no está en la lista, o realizamos cualquier viaje, lo más posible es que no podamos acceder a ellas. Las compañías continuarán desplegando sus redes para cubrir la mayor parte del territorio que les sea posible, y en estos momentos compañías como Yoigo, Orange o Jazztel tienen previsiones de llegar hasta el 75% en este mismo año.
Gracias a la cobertura 4G, la calidad de las conexiones es superior a la que podíamos tener hasta hace poco, por ejemplo a la hora de ver vídeos o películas en alta definición y streaming o descargar ficheros de una forma casi inmediata. Disfrutar de este tipo de ocio con una gran calidad es una ventaja muy importante, sobre todo para el tipo de cliente actual, pero así mismo continúa consumiendo muchos datos.
De esta forma, es probable que acabemos consumiendo nuestra tarifa de rápidamente, y por lo tanto veamos muy reducida nuestra velocidad de conexión o tengamos que pagar cantidades adicionales. Lo cual puede suponer que el contrato de una red 4G no sea una buena estrategia de ahorro, pero si lo que valoramos es la posibilidad de acceder a este tipo de servicios con una gran calidad, este tipo de conexiones siempre avanzan con respecto a las anteriores en este tema.
De hecho, compañías como Samsung ya están pensando en dar el salto a la quinta generación, antes incluso de que la cuarta se haya extendido a la mayoría de los clientes de telefonía. Según ha anunciado, tiene planeado poder empezar a comercializarla en el año 2020. Por su parte, Europa también se encuentra trabajando para la implantación de la tecnología 5G en el territorio.
Si las redes 5G llegan antes de que los usuarios hayan podido amortizar sus inversiones en la tecnología actual, es posible que la tecnología 4G se quede obsoleta de una forma demasiado rápida, incluso para estar hablando de este tipo de innovaciones, que son de las que más avanzan en poco tiempo.
Dependiendo de qué servicio estemos buscando, para qué usos y durante cuánto tiempo, puede resultarnos rentable, o no, contratar una tarifa móvil 4G con nuestra compañía telefónica.